Soplan buenos vientos para las obras de Javier Sierra. La semana pasada, mientras el escritor turolense se encontraba en Zürich atendiendo una conferencia internacional de astronautas y científicos que celebraban los 50 años de la llegada del hombre a la Luna, su galardonada obra El fuego invisible se lanzaba en Polonia. Bajo el título de Niewidzialny płomień, este es el séptimo título suyo que ve la luz bajo el sello “Sonia Draga”, uno de los más importantes del país. “Los lectores polacos no me son ajenos”, declaró ayer a este periódico. “He participado en varios de sus festivales y ferias literarios y comprobado la pasión que despiertan allí las novelas con trasfondo histórico. Incluso una obra aparentemente ‘local’ como El maestro del Prado cuenta con numerosos lectores, apasionados del arte”.
Semejante pasión es palpable también en Bulgaria, uno de los pocos países que ha traducido toda la obra del autor, incluyendo ensayos como En busca de la Edad de Oro o La ruta prohibida. Allí, El fuego invisible se lanzará a final de año y ya se prepara una gira de Javier Sierra para conmemorar el exitoso relanzamiento de La cena secreta, con motivo de los 500 años de la muerte de Leonardo da Vinci. “Vivimos un tiempo en el que una historia bien contada necesariamente se convierte en universal. Los traductores del español son excelentes en muchos países y contribuyen enormemente a la difusión de nuestro talento”, recuerda, subrayando el valor de una profesión -la de traductor- que según él merecería un mayor reconocimiento.
Objetivo: Armenia
Preguntado por sus planes literarios más inmediatos, a Javier Sierra le brillan los ojos. “Si, hay algo especial en el horizonte”, dice. “Estamos cerrando el lanzamiento de una de mis novelas más queridas, El ángel perdido, en Armenia para el año que viene”. Esa novela, publicada en España en 2011, tiene como uno de sus escenarios fundamentales el Monte Ararat y la búsqueda de los restos del arca de Noé en esa cumbre emplazada entre Turquía, Irán y Armenia. “Para los armenios se trata de su monte sagrado, su referencia visual permanente. Incluso luce en el centro de su bandera. Es casi de justicia que ese libro, que bucea en los orígenes de la tradición cristiana, pueda leerse en ese país”.
Con la próxima publicación de El ángel perdido en Armenia, serán ya 45 los países que contarán con libros publicados de nuestro autor más internacional. “Confío en que uno de mis primeros lectores allí sea Armen Sarkissian, el presidente de Armenia, a quien saludé la semana pasada en Zürich y se mostró muy interesado en la obra”, sonríe. Sarkissian fue elegido presidente el pasado 9 de abril y busca situar a su país en la senda de la cultura y el avance científico. Por eso viajó a Zürich a encontrarse con Premios Nobel y astronautas, y tuvo tiempo para dedicarle unos minutos a nuestro autor.
Sierra, en cualquier caso, encaja todos estos movimientos literarios en medio de una intensa temporada de rodajes para la segunda temporada de su serie “Otros Mundos”, que le ha llevado ya a Suiza e Italia, y en breve a los Estados Unidos y, espera, a Teruel, para seguir transmitiéndonos su pasión por los misterios que nos rodean.